En Polanco, Ciudad de México.

Inspirada en una taberna española, La Mallorquina refleja a través de sus interiores un restaurante acogedor y tradicional, al mismo tiempo que se vuelve un espacio sofisticado y elegante.

Todo fue diseñado a la medida: desde el lavabo hasta los menús, el logotipo y las sillas. Al entrar, la vista inmediatamente se dirige a los plafones de madera, los cuales cambian de dirección para guiar la vista al punto focal del restaurante: el bar de gin tonics.

En la barra de madera de parota uno puede observar las diferentes botellas que ofrece la casa, las cuales están mezcladas con antigüedades y objetos que dan personalidad al lugar; además, se combinan con los gráficos que hacen referencia a recetas y frases típicas españolas, dando un toque de humor.

En el salón principal se observa al fondo una cava, fabricada en herrería e inspirada en los hierros de una ganadería taurina, la cual rodea las patas de jamón que descansan como remate visual del salón.

El piso de laja gris oscura y el ladrillo- colocado de manera aleatoria- se combinan con los plafones de madera para lograr un ambiente español muy agradable y con mucha personalidad.

También se diseñó un bar de tapas, donde el mobiliario más informal permite disfrutar de un buen pintxo rodeado de un entorno auténticamente español.

Nombre del proyecto: Restaurante LA MALLORQUINA

Ubicación: Emilio Castelar 65, Polanco, Ciudad de México

Tipo de Obra: Restaurante

Nombre de los autores: faci leboreiro arquitectura / Carlos Faci y Marina Leboriero en colaboración con macia ubierna arquitectos

Colaborador: Joaquín Macia

Área: 185 m2

Fotografía: Jaime Navarro

Visita a faci leboreiro arquitectura: facileboreiro.com